EL
CASO NINA KULAGINA PRIMERA
EVIDENCIA CIENTÍFICA DE PODERES PSÍQUICOS…
Por el
año de 1970 científicos rusos reportan un
extraño fenómeno en una de sus
ciudadanas, quien manifestaba tener poderes de
telequinesia (Capacidad
de mover ligeros objetos con la mente). No obstante, por causa de la
“guerra fría” de aquellos tiempos,
opacaron las investigaciones quedando en secreto hasta mucho tiempo
después.
En documentación a través de videos efectuado por
los científicos de Leningrado se observa a la misteriosa
mujer moviendo cerillas de fósforos, lápices y
agujas de brújulas sin tocarlos. La misma manifestaba que
sus poderes llegaban a través de la concentración
donde despejaba su mente de todo tipo de pensamiento. Pudiendo
paralizar por completo el corazón de una rana entre algunos
de sus muchos experimentos.
Nina también descubrió otros poderes ocultos como
la de revelar figuras, palabras y números con los
ojos totalmente cubiertos, y la telepatía. Además
poseía el poder de aumentar la temperatura de sus manos
emitiendo un anormal y fuerte calor en las cosas que tocaba.
Las pruebas demostraron que, al momento de producirse
la telekinesis, se creaba un poderoso campo
magnético en torno al cuerpo de la joven, mientras
su ritmo cardíaco subía de manera
sorprendente. Con los años, el uso constante de sus
actividades paranormales influyó en su sistema
claudiovascular produciendo su muerte a la edad de 65 años.
Se sabe de la capacidad del cerebro para crear energías que
normalmente se descarga por los ojos produciendo fenómenos
que aún son estudiados por la ciencia de la
parasicología. Antiguamente se creía que estos
fenómenos eran producidos por espíritus
traviesos, demonios u otras fuerzas sobrenaturales. Hoy en
día se entiende como “energía
psíquica” que se revela en muy pocas personas en
el mundo pudiendo ser negativa o positiva para los seres vivos.